La Conferencia del Episcopado Mexicano considera que el próximo Gobierno Federal requiere de un sistema de contrapesos, para lograr reconstruir el tejido social.
Su presidente y también arzobispo de Guadalajara, Francisco Robles Ortega, llamó a los fieles católicos a organizarse y a la Iglesia a impulsar la participación ciudadana, y subrayó que los obispos deberán colaborar con las nuevas autoridades en temas comunes.